Caza con galgos

En España, la caza con galgos es una forma de caza antigua y tradicional. La idea es que dos galgos sean sueltos y uno de ellos cace, atrape y mate una liebre. Por lo general, una línea de cazadores camina con los perros por un campo abierto en busca de liebres escondidas. Cuando una liebre salta, los cazadores sueltan a dos galgos que se ponen an perseguir a la liebre.

A la edad de dos o tres años, la condición física de los galgos comienza a deteriorarse. Cuando los perros de caza no son lo suficientemente rápidos y ya no sirven al cazador, son arrojados como artículos desechables o incluso matados. Los galgos son perros inteligentes que dominan cada vez más el “juego” de la caza. Los cazadores establecen ciertas reglas para la caza. Por ejemplo, si un galgo toma un atajo para atrapar la liebre, va en contra de esas reglas y perjudica el honor del cazador. Algunos cazadores castigan a sus galgos por este comportamiento, por la superstición de que sus descendientes aprenderán de él. Una forma de castigo es ahorcas al galgo de un árbol, donde aun pueda tocar el suelo con las patas. Una lucha de muerte que a veces dura tres días. En otros casos, los galgos son arrojados a pozos, donde se ahogan o mueren de hambre. Además de la caza de galgos, también están los campeonatos, que causan mucho sufrimiento a los animales. Lee más sobre los campeonatos aquí.

Los refugios rescatan tantos perros de caza como sea posible. A veces los refugios ya no pueden manejar la gran cantidad de perros que siguen llegando. Muchos de estos perros están siendo adoptados en España o en el extranjero, donde les espera un futuro brillante. Desde CAS International no nos enfocaremos en la adopción de perros, y tenemos una buena razón para ello. Estamos tomando el camino político para prohibir la caza espantosa y detener para siempre el abuso de galgos, podencos y otros perros de caza.

España es el único país europeo donde se permite la caza de animales en campo abierto y donde los perros de caza pueden matar a sus presas. Estas son prácticas que están prohibidas en otras partes de Europa. Sin embargo, a través del artículo 13 del Tratado de Lisboa existe una excepción para prohibir determinadas formas de sufrimiento animal que forman parte de las tradiciones culturales, los ritos religiosos y el patrimonio regional. Lucharemos tanto en España como en Bruselas.

¡Ayuda a los galgos y otros perros de caza! Hágase socio o haga un donativo.

Foto: Pixabay